400 g de carne de vacuno picada
200 g de carne de cerdo picada
80 g de mortadela en rodajas finas
40 g de leche fresca
4 huevos
4 cucharadas de queso parmesano rallado
2 rebanadas de pan de molde sin corteza
1 diente de ajo
1/2 vaso de caldo de verduras
perejil al gusto
aceite EVO
sal
pimienta negra
Para 4 personas
Ponemos tres huevos en una cacerola, cubrimos con agua fría y llevamos a ebullición. Cocinamos diez minutos desde que el agua empieza a hervir. Luego, apagamos el fuego, escurrimos y los ponemos en agua fría para detener la cocción. Cuando estén fríos, pelamos los huevos duros y reservamos.
Pelamos el diente de ajo, retirando el germen central, y lo picamos con el perejil. Cortamos el pan en cubitos y lo remojamos en leche. Ponemos en un bol la carne de vacuno y de cerdo picada y añadimos un huevo, el queso parmesano rallado, la picada de ajo y perejil y el pan de molde escurrido. Sazonamos con sal y pimienta y mezclamos todo hasta obtener una mezcla homogénea (si es necesario, mezcla con las manos mojadas).
Extendemos la mezcla sobre una hoja de papel de horno, la aplanamos bien y formamos un rectángulo de aproximadamente 1 cm de grosor. Ponemos encima las láminas de mortadela y los huevos duros formando una fila longitudinal en el centro. Ayudándonos con el papel de horno, envolvemos el pastel de carne sobre sí mismo y lo enrollamos.
Precalentamos el horno a 180 °C en modo estático.
En una fuente de horno, doramos el pastel de carne con tres cucharadas de aceite EVO. Vertemos el caldo caliente, cocinamos a fuego alto durante 5 minutos y luego ponemos la fuente en el horno. Cocinamos 50 minutos o hasta que el pastel de carne esté dorado. Durante la cocción, recuerda bañar de vez en cuando el pastel de carne con su jugo de cocción.
Cuando esté hecho, saca el pastel de carne con huevos duros del horno y déjalo enfriar antes de cortarlo en rodajas y servirlo con mucha salsa verde.